Cuando me detengan, porque espero que algún día me detengan, seguro que he hecho méritos suficientes, cuando me detengan, quiero que sea en esas condiciones. Bebido y en pleno acto de excentricidad.
Pues bien, en el Festival de Cine de Venecia al amigo Bill le han preguntado acerca del incidente.
Murray explicó que estuvo en agosto en Estocolmo para participar en un torneo de golf, y después acudió a una fiesta posterior a los mandos de un carrito de golf. Como nadie quería conducir hasta casa, el [sic] se presentó como voluntario con su vehículo: "Acabé dejando gente en el camino como si se tratase de un autobús. Llevaba hasta seis pasajeros y los fui dejando uno a uno".
Yo quiero ir a esa clase de fiestas.
La policía le interceptó cuando dejaba a su último pasajero en un 7-Eleven. "Yo no sabía que hubiera 7-Elevens en Estocolmo", comentó.
Ahí, vacilando. La escena con la policía también tuvo que ser gloriosa:
"Yo les expliqué que simplemente era un jugador de golf"
Él con voz pastosa, subido al carrito de golf (creo que nunca me cansaré de decirlo), intentando convencer a la policía de que está perfectamente sobrio, de que en realidad es un jugador de golf. "Me dirigía al hoyo nueve. Creo que he perdido de vista la bola. ¿Habéis visto la bola por aquí? Disculpad, voy a seguir buscando".
1 comentario:
Jejejeje. No es ni más ni menos que un suceso coherente con la propia personalidad de Bill Murray y los papeles que interpretó a lo largo de su carrera, y si no vean "Flores Rotas" o "El dia de la marmota". Es todavia una de la pocas estrellas del Star System q aun me sigue intrigando.
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